domingo, 23 de junio de 2013

AL SERVICIO DE LOS NIÑOS



El mundo de las escuelas se basan en principio no en lo que necesites aprender sino en lo que supuestamente te quieren enseñar.

Antiguamente se enseñaba para dividir la sociedad en distintos sectores, mano de obra, o mano de obra indirecta, intelectuales, gente que está destinada más para mandar... y así se estructuraba la sociedad. 
Eliminando el instinto, y haciendo un orden casi establecido, por una serie de señores que se supone que eran los que más sabían de ése orden. 

En las escuelas las maestras, profesores, tienen pánico a ser cuestionados y a no saber responder a una sola pregunta de un niño o de un adolescente; porque entonces "yo no sería el maestro ya que no he sabido contestar. Por tanto nos ceñiremos a lo que pone en el texto del libro. Si tenemos el libro, ya no hago falta, lo que haré será insistir en que leas el libro, insistir en lo que pone en el libro, insistir tan solo siendo el vigilante del libro. Así, no inquietaré a nadie, no inquietaré a mis jefes".

Si la maestra está al servicio de los niños, está a lo que necesiten, y eso conlleva un tiempo de aproximadamente entre 20 y 24 horas diarias. Que es, "todo aquello que no sé, lo sabré con urgencia para poder solucionar los planteamientos que me hagan los niños". Y es constante porque los niños necesitan atención a su salud, a su mente, a sus temores, a sus ilusiones, a sus mocos, a sus manera de correr, a todo. Hay que saber de medicina, de medicinas alternativas, hay que saber de psicología, hay que saber hasta de padres, por qué hicieron esos niños, y qué ocurrió ya en el embarazo y después. Cosa que no se va a cuestionar nunca y que la maestra debe adivinar creando además esa isla de bienestar para esa criatura.












No hay comentarios:

Publicar un comentario